Por Georges Saab*
Es difícil creer que han pasado 25 años desde que Java estuvo disponible oficialmente. Por otro lado, parece que han pasado varias eras – y de cierta manera, sí han pasado.
Todavía recuerdo la sensación de emoción que tuve al unirme a JavaSoft, trabajando con el pequeño pero dedicado equipo, que esperaba ansioso cada día para poder trabajar en este nuevo y fantástico lenguaje. El equipo provenía de diferentes áreas, desde profesionales de la programación y diseño de tiempo de ejecución, pasando por expertos en interfaces de usuario y gráficos, hasta ingenieros de sistema operativo, e incluso un ontólogo. Hemos tenido un excelente grupo de redactores técnicos, ingenieros de calidad, profesionales de marketing, gerentes de producto y personal del área comercial. Y, lo mejor de todo, teníamos en una misión: hacer la vida de los desarrolladores más sencilla. Como solíamos decir (medio en broma) “¡escribimos código nativo para que no tengas que hacerlo!”.
A pesar de ser un pequeño grupo – pensamos en grande. Hay tantas compañías y personas que creyeron en la posibilidad de “compilar una vez y ejecutar donde sea” que, en lugar de cubrir todos los distintos sistemas operativos y hardware – el reto que teníamos que enfrentar era cómo canalizar, enfocar y organizar los esfuerzos de tantas partes que querían… ¡unirse a la fiesta!
Por ahora, esa visión original, pero ambiciosa, ha sido alcanzada y superada muchas veces en la medida en que Java ha evolucionado para ayudar a los desarrolladores a hacer frente a los nuevos desafíos. La industria del software adoptó Java porque hizo del desarrollo un placer, resolvió problemas de distribución y eliminó los problemas de constantemente trasladarse entre plataformas.
Java fue aprovechado por el creciente universo de sitios web e hizo que el contenido estático cobrara vida, no solo con cosas divertidas como el juego Bouncing Ducks, sino también con un uso real para la distribución de aplicaciones de negocios.
La utilidad Java se intensificó cuando la gente se dio cuenta de cómo podría resolver sus problemas de servidores – llevando la productividad, el rendimiento y la escalabilidad a nuevos niveles. Desde la distribución de software pasando por el escalamiento del lado del servidor de la arquitectura multinivel, para aprovechar las arquitecturas de hardware en constante mejora, hasta las implementaciones nativas de nube y mucho más.
Durante todo el recorrido, quienes decidieron apostar por Java fueron recompensados con una tecnología que ha evolucionado continuamente para brindarles soporte. A lo largo de los constantes cambios en la industria, Java proporcionó un ritmo constante de estabilidad, compatibilidad y un creciente ecosistema de herramientas, bibliotecas y marcos para elegir.
25 años después, me siento honrado de liderar este recorrido aquí en Oracle. Mi equipo de ingeniería continúa centrando sus esfuerzos en la construcción de las primeras metas de facilidad de uso, la confiabilidad, seguridad e independencia de plataforma, trabajando de forma transparente y acogiendo la retroalimentación y la colaboración para hacer que Java se mantenga robusto en su segundo cuarto de siglo.
Nuestra visión de hoy es la misma a de la de entonces – una búsqueda incesante de productividad del desarrollador y de desempeño de los programas, manteniendo la legibilidad y la compatibilidad frente a un escenario tecnológico en constante evolución.